El pulpo es muy difícil de elaborar en conserva ya que requiere de un minucioso proceso artesanal para que el producto final sea perfecto. Una vez en nuestras instalaciones procedemos a su limpieza manual para su posterior congelación. Un proceso necesario para lograr romper las fibras de su carne y así conseguir la ternura adecuada. El tiempo de cocción del pulpo es uno de los puntos más importantes para lograr la textura que buscamos. Posteriormente se cortan los tentáculos con tijeras, como hacen las famosas “pulpeiras” por toda Galicia y se acompaña con una deliciosa salsa al ajillo, elaborada con aceite de oliva aderezado con ajo y un ligero toque de guindilla.