La cebolla francesa es uno de nuestros sabores favoritos: si comemos patatas fritas, será ese. Y si estamos en un bistró y está en el menú, puedes estar seguro de que pediremos, y solo compartiremos a regañadientes, nuestra sopa favorita. Por eso, nos hemos propuesto liberarnos de la tiranía de las patatas fritas y la sopa; nuestra (excesiva) indulgencia con cebolla francesa ya no se limitará a unos pocos alimentos. No, hemos dado libertad de sabor a French Onion y ahora puedes disfrutar de su exquisitez característica en lo que quieras. Para nosotros, nuestra obsesión nos ha llevado en direcciones interesantes. 3 oz (85 g) de peso neto No transgénico. Respaldo magnetizado: se adhiere a la nevera u otra superficie metálica. Elaborado en lotes pequeños. Empaquetado a mano en California con ingredientes locales. No irradiado ni tratado con gas EtO. Totalmente natural: sin colorantes ni sabores artificiales. Sin trigo, soja, frutos secos, productos lácteos ni gluten.