Miel de acacia cruda, pura, prensada en frío y orgánica de los exuberantes valles de Hungría, el hecho de que sea 100% procesada de manera natural le permite conservar todas sus propiedades naturales. Su contenido naturalmente bajo en polen la convierte en una de las mieles menos alergénicas, además de permitir su uso eficaz como agente curativo natural, principalmente debido a sus propiedades antimicrobianas, lo que le permite convertirse en un poderoso antioxidante en la dieta moderna. Quizás la propiedad más única que tiene la miel de acacia es que rara vez se cristaliza a temperaturas normales, principalmente porque la miel de acacia tiene una alta proporción de fructosa/glucosa, por lo que incluso después de su uso inicial dura mucho más tiempo en el estante en comparación con otras mieles.