No estoy seguro del día exacto en que decidí que los problemas del mundo eran míos para solucionarlos. Supongo que es parte de ser el que cuida, el ángel guardián, el rescatador. Si alguien me necesitara, le quitaría sus problemas y los soportaría durante un tiempo. A pesar de que no podía arreglarlo para ellos. A pesar de que sabía que no debía arreglarlo para ellos. Pero aun así quitaría esa carga y la añadiría a mi ya pesada carga. Independientemente del problema. Y el nivel de drama innecesario. Siempre he sentido el dolor de otras personas, intensamente. No sé si mi alto nivel de empatía es un rasgo aprendido o heredado, pero siempre ha sido parte de mí. Dentro de mí, puedo sentir la pesadez cuando me encuentro con alguien que lleva una gran carga.