Lugar de cultivo: India. Lawsonia Inermis o Henna, es una planta que tiene como característica principal, su poder de pigmentación. Mezclándola con agua caliente, libera su pigmentación cobriza. La coloración a base de Henna actúa a modo de deposito, esto significa que la molécula que permite la coloración, se deposita en nuestro cabello y con el paso de las aplicaciones va aumentando el tono que aporta. Puesto que se trata de una coloración vegetal, la Henna no estropea el cabello, ya que no abre la cutícula para modificar tu color natural, si no que lo deposita sobre ella, como consecuencia, la Henna no tiene poder de aclarar el cabello. El color que aporta la Henna es cobrizo, y la intensidad de coloración que aportará sobre el cabello dependerá del tono inicial, por lo que los cabellos más claros conseguirán potentes cobrizos y los castaños y morenos unos reflejos al sol.