Nuestro picual es recogido en nuestro olivar a mediados de octubre, fecha justo antes del envero de las aceitunas, ofreciendo así un color verde intenso con un alto grado de clorofilas, dotándoles de gran vitalidad. En nariz, rápidamente percibimos un frutado muy joven de hierba verde, plátano, tomatera y manzana verde. Al trasladarlo a boca sigue manteniendo los matices herbáceos. Acompañando al frutado nos encontramos igualmente un picante agradable, evolucionando en garganta, con un leve amargor que persiste en boca y con una estructura muy equilibrada. Maridaje: carnes, pescados, pastas, quesos.