Un vestido de verano es una prenda diseñada para mantener a las personas frescas, cómodas y elegantes durante los días calurosos y soleados de la temporada de verano. Por lo general, es ligero, aireado y con colores y patrones vibrantes que reflejan la alegre atmósfera del verano. Un vestido de verano suele ser corto o mediano, lo que permite que las piernas queden expuestas y proporciona un toque fresco y juvenil. Suelen tener escotes más abiertos o con hombros descubiertos, como los cuellos en V, los cuellos halter o los escotes Bardot, que son ideales para aprovechar el sol y resaltar el bronceado.