Es en la lejana Taiga donde crece el ginseng siberiano. Esta planta adaptogénica y antioxidante restaura la vitalidad y tonifica los contornos de los ojos cansados. Asociado a la vitamina E, un antioxidante natural, este tratamiento ayuda a desvanecer las líneas finas y arrugas, disminuye la hinchazón y las ojeras y ralentiza los signos del envejecimiento cutáneo. Su fórmula fluida y ligera hace que el área de los ojos sea visiblemente más joven y tonificada. Aplicar sobre la piel limpia, masajeando ligeramente desde el centro del área de los ojos hacia afuera. Para obtener mejores resultados, renueva mañana y noche. 97% de los ingredientes naturales polares. Sin aceite mineral, sin parabeno, sin fenoxietanol, sin alcohol. Probado bajo control dermatológico, para todo tipo de piel, incluso para las más sensibles. Fabricado en Francia: cultivamos y cosechamos con cuidado y de forma sostenible nuestros ingredientes naturales en zonas polares antes de finalizar la fabricación de los productos en Francia.