Aceite de camelia: Este aceite espeso es rico en antioxidantes y ácidos grasos. Puede ayudar a nutrir e hidratar tu cabello, dejándolo suave y sedoso. También puede proteger tu cabello del daño por calor y de los factores de estrés ambientales. Glicerina: La glicerina es un humectante que ayuda a retener la humedad en tu cabello. Puede añadir brillo, suavidad y manejabilidad a tu melena. Sin embargo, ten cuidado en ambientes secos, ya que la glicerina puede extraer humedad del aire o, si no hay, de tu cabello. Cera de candelilla: Esta cera proporciona una barrera protectora en la superficie de tu cabello, reteniendo la humedad y reduciendo el encrespamiento. También puede añadir brillo y ayudar con la manejabilidad. Combinar estos ingredientes para usar en tu cabello podría resultar en: Cabello suave, hidratado y manejable Reducción del encrespamiento y aumento del brillo Protección contra el daño por calor y los factores de estrés ambientales Usos: Tratamiento pre-champú Tratamiento sin enjuague Sérum capilar Producto de peinado Mascarilla nocturna Reparación de puntas abiertas Control de cabellos sueltos