Este jabón se elabora mediante el proceso de saponificación en frío, una técnica ancestral y sin la liberación de productos tóxicos al medio ambiente. Este proceso permite obtener jabones supergrasos de forma natural que ayudan a hidratar la piel, gracias a la glicerina que se forma durante la concepción. Hemos seleccionado cuidadosamente materias primas locales de calidad. ¡La leche orgánica de nuestras vacas, criadas en las montañas, le da una acción suavizante y una espuma cremosa muy agradable! Hecho a mano en nuestra granja, ¡es único! Uso: desde el nacimiento, todo tipo de piel, rostro y cuerpo Peso neto (sin incluir el envase): 115 gramos