Adecuado para usar después del afeitado y como tratamiento habitual de la piel. Los ácidos húmicos y fúlvicos ayudan a estimular la renovación celular y restablecen el funcionamiento normal de la piel. La mascarilla ayuda con una gran cantidad de problemas de la piel, estimula la producción de colágeno y combate eficazmente los signos del envejecimiento. El árbol del té ayuda a curar cortes menores y tiene propiedades antisépticas. La menta refresca y revive la piel. Apto para todo tipo de pieles. Aplicar sobre la piel húmeda evitando el contorno de los ojos. Déjalo sobre la piel durante 10 minutos, para pieles sensibles déjalo durante 5 minutos. Recuerda mantener la mascarilla húmeda mientras la llevas puesta; de vez en cuando humedece con los dedos mojados o rocía con tónico de turba.