Esta potente crema antienvejecimiento está elaborada con miel de Manuka de Nueva Zelanda, veneno de abeja y aceites botánicos nutritivos para ayudar a levantar, reafirmar y rejuvenecer visiblemente la piel, de forma natural. El veneno de abeja estimula suavemente los músculos faciales para crear un efecto reafirmante, al tiempo que apoya la circulación saludable para aumentar la producción de colágeno y elastina con el tiempo. La miel de Manuka, conocida por sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, calma la piel irritada, cura las imperfecciones y retiene la humedad para una tez suave y radiante. Ideal para boutiques, tiendas de belleza natural, boticas y minoristas de bienestar que buscan ofrecer un producto destacado con ingredientes probados y una historia de origen convincente.