Nuestros distintivos termómetros ornamentales (pero funcionales) utilizan el descubrimiento del astrónomo del siglo XVII Galileo Galilei de que la densidad de los líquidos varía con la temperatura. Los globos de vidrio, cuidadosamente ponderados, se suspenden en un tubo lleno de líquido, donde se hunden o flotan tranquilamente a medida que el aire circundante se calienta o se enfría. La temperatura se indica mediante la etiqueta de latón grabada en el globo flotante más bajo. 11 modelos de globo miden 24 pulgadas de alto, siete modelos de globo miden 17 pulgadas de alto, cinco modelos de globo miden 13 pulgadas de alto y los modelos Piccolo (cinco globos) miden 11 pulgadas de alto. La temperatura se muestra en grados Celsius.