De niña, Nezhukumatathil llamó hogar a muchos lugares: los terrenos de una institución mental en Kansas, donde su madre filipina era doctora; los cielos abiertos y las altas montañas de Arizona, donde caminaba con su padre indio; y los climas más fríos del oeste de Nueva York y Ohio. Pero sin importar dónde fuera trasplantada, podía recurrir a las criaturas feroces y divertidas de nuestro mundo en busca de orientación. El ajolote nos enseña a sonreír, incluso frente a la falta de amabilidad; la planta mimosa nos muestra cómo sacudirnos los avances no deseados; el narval demuestra cómo sobrevivir en entornos hostiles. Incluso en lo extraño y lo poco atractivo, Nezhukumatathil encuentra belleza y parentesco. Porque así es la maravilla: requiere que seamos lo suficientemente curiosos como para mirar más allá de las distracciones y apreciar plenamente los regalos del mundo. Cálido, lírico y hermosamente ilustrado por Fumi Nakamura, Mundo de Maravillas es un libro de sustento y alegría. (Descuento Medio)