Simplemente carne de jabalí, nada más. En napani también nos preocupamos por la buena calidad en nuestra propia alimentación. Por eso, para nosotros es natural e importante que nuestros amigos de cuatro patas reciban solo lo mejor en su cuenco para el bienestar de su salud. Siguiendo el lema: "tu perro es lo que come". Solo ofrecemos una fuente de carne (monoproteína) y se cocina al vapor suavemente. Así se conservan la mayor cantidad posible de vitaminas y minerales de la carne. Para obtener un alimento adecuado y completo, mezcla nuestra base alimenticia, suplementos vitales y aceites vitales. ¡Mezclar es posible! • Jabalí de su entorno natural • Cocido al vapor de manera natural y suave • Producido de manera neutra en CO² • También apto para perros con estómago sensible • Monoproteína • Fuente de proteína de fácil digestión • Apto para BARF - sustituto si la alimentación cruda no es tolerada • Algas como aglutinante natural • Libre de colorantes, aromas y rellenos • Libre de atrayentes • Libre de cereales y gluten • Libre de antibióticos, otros medicamentos y hormonas Lo que contiene: La carne de jabalí contiene mucha proteína, esencial para la construcción y mantenimiento de músculos, piel y pelaje, así como para el sistema inmunológico. Rica en hierro, zinc y vitaminas B, que apoyan la formación de sangre, los nervios y el sistema inmunológico. Relativamente baja en grasa, especialmente en comparación con la carne de cerdo de cría convencional. El jabalí pertenece a las llamadas "carnes exóticas" y rara vez se utiliza en alimentos estándar para perros. Por lo tanto, es ideal para: • Alergias alimentarias • Dietas de exclusión • Digestión sensible Para su información: Al cocinar al vapor la carne, que en nuestro caso se compone de 65 % de carne magra y 35 % de vísceras, puede salir jugo de carne. Dependiendo del tipo de carne utilizada (por ejemplo, animal joven o mayor) y su consistencia, el contenido de la lata puede variar. La carne magra está compuesta, entre otras cosas, por tejido conectivo que contiene colágeno. También los tendones y cartílagos están hechos de colágeno. Este colágeno se transforma lentamente en gelatina durante la cocción, esa masa suave y gelatinosa que también se conoce del glaseado de tartas. Esta gelatina es responsable de que la carne no se seque, sino que se vuelva más jugosa con el tiempo de cocción prolongado.