La cebada, un grano antiguo, aporta un fuerte sabor a nuez a ensaladas, sopas y guisos, o puede sustituir el arroz en platos de curry, salteados y risotto. Esta cebada se descascara para permitir una cocción más rápida y fácil, al tiempo que deja gran parte del salvado intacto para preservar sus propiedades nutricionales y garantizar un delicioso bocado masticable, que se mantendrá incluso cuando esté fría. La cebada fue uno de los primeros granos cultivados del mundo. La cebada Fontana Formiello se cultiva al pie de los Alpes, en el norte de Italia. Información útil: añada cebada cocida a cualquier sopa o guiso de una sola olla para darle cuerpo y sabor. Cocínelo en caldo y añada verduras para hacer un sabroso pilaf o risotto. Mezcle la cebada fría y cocida con verduras picadas y el aderezo casero para preparar una ensalada fría y rápida. Mezcle la cebada con el puré de frijoles negros para hacer una base para deliciosas hamburguesas vegetarianas. La cebada también se puede utilizar como una variación del arroz para hacer deliciosos pudines.