En colaboración con el maquillador de celebridades, Daniel Martin, La Forêt Noire captura la elegancia del contraste: el fresco impulso de la menta de invierno equilibrado por la cálida tranquilidad del enebro encendido. Es una fragancia que se siente moderna pero atemporal, minimalista pero con capas, una vela diseñada para transformar momentos cotidianos en algo silenciosamente mágico. Inspirada en la estética reflexiva de Daniel (y en su gato negro, Weezy, que sabe un par de cosas sobre el misterio), esta vela es segura para todos los compañeros: apta para mascotas, limpia y aprobada por veterinarios. Una parte de los ingresos apoya a Meow Mission, ayudando a más gatos a encontrar hogares seguros llenos de amor y luz.