Seamos honestos: Muchas tarjetas de Año Nuevo son explosiones de purpurina o promesas vagas sobre "nuevos comienzos". Esta no es ninguna de las dos. Es alegremente desquiciada, descaradamente nostálgica y científicamente probada para hacer que la gente diga: "Oh dios mío, sí". Este diseño clava esa energía post-vacacional donde todos están exhaustos pero aún aferrados a un destello de brillo, solo que no literalmente. #SinPurpurina Es perfecto para los compradores que prefieren brindar por el fin de año con una fiesta de baile con alcohol en lugar de un tablero de visión. Piénsalo como la energía de los estudios Paisley Park en forma de tarjeta de felicitación: funky, catártica y ligeramente desafiante. Si a tus clientes les encantan los colores atrevidos, las referencias a la cultura pop y las tarjetas que suenan como si las hubiera escrito gente real (porque así fue), esta debe estar en tu estante. Es el tipo de diseño que atrae a la gente con una risa y los deja diciendo: "Sé *exactamente* quién necesita esto". Detalles del producto: * Tamaño: 5” x 7” — lo suficientemente grande para un toque dramático, lo suficientemente pequeño para esconder en una funda de disco * Incluye un sobre de papel kraft * Interior en blanco * Impreso en EE. UU. por humanos que también se niegan a hacer el Enero Seco * Una parte de esta venta beneficia la investigación del cáncer en mujeres en Northwestern, el hospital más morado © Pretty Good Cards, LLC