Un aroma para aquellos que llevan su oscuridad como un manto de terciopelo, orgullosos e impenitentes. Una alianza de rosa, clavo y azafrán se entrelaza con la claridad resinosa del bálsamo de abeto obtenido del árbol Abies balsamea en el noreste de Canadá. El corazón desciende hacia la decadencia: oud y pachulí crean un retrato de magnífica descomposición, marcado por un rastro de escape de diésel. Esta es la rebelión moderna.