Hemos estado intercambiando correos electrónicos con la Fundación de Parques de Los Ángeles durante un par de años, hablando sobre un huerto de naranjos escondido en Franklin Canyon. Este año, Sqirl finalmente consiguió algunas Navel de esta joya oculta. La LAPF mantiene el huerto y supervisa la distribución de sus tesoros cítricos a bancos de alimentos locales, almuerzos escolares y otros centros de distribución comunitaria. Ha existido desde 1938 y ahora es uno de los últimos huertos que quedan en Los Ángeles, por lo que estamos donando una parte de los ingresos de estos frascos para el mantenimiento de este hermoso terreno comunitario. Todo lo que hemos añadido al esplendor de esta fruta es una infusión de pétalos de rosa que te da esa sensación de caminar por el jardín en primavera.