La jalea real, el polen y la semilla de nigella combinados con esta miel de montaña la convierten en la miel potenciadora de vitalidad definitiva. El polen de las flores es uno de los tesoros de la colmena, es recolectado por los apicultores en las colmenas en forma de bolitas, contiene naturalmente antioxidantes, proteínas vegetales y muchos aminoácidos esenciales para la vida. La jalea real es una sustancia de color blanco amarillento secretada por las glándulas faríngeas, que se encuentra en las cabezas de las abejas nodrizas jóvenes. Este superalimento se compone de agua (66%), proteínas (13%), carbohidratos (14,5%), lípidos (4,5%) y muchas vitaminas (como B1, B2, B3, ácido fólico, B5, B6, H) y en cantidades más pequeñas, vitaminas A, B y D). Estos últimos desempeñan un papel importante en el mantenimiento del buen equilibrio de las organizaciones.