Un oso se sienta en silencio, mirando hacia dos cardenales de un rojo brillante posados arriba. El momento está capturado en una impresionante pintura en acuarela, con la actitud pacífica del oso y los colores vibrantes de los cardenales cobrando vida con pinceladas hábiles. La pintura transmite una sensación de tranquilidad e introspección, mientras el oso parece contemplar el mundo que lo rodea, mientras los cardenales continúan con sus asuntos en los árboles. Arte de Dean Crouser.